El Síndrome de Obama: del podemos… al hacemos
Muchos directivos me recuerdan a Obama por su gestión de expectativas principalmente cuando se acerca el principio de un nuevo ejercicio. En USA ya se habla del Síndrome Obama para aquellas personas que con gran oratoria te ilusionan con promesas pero después escasean los hechos de su actividad. Hacer lo que se dice es la premisa de una buena gobernanza empresarial y las promesas cuando se incumplen pasan factura. La gestión realista de una dirección de personas pasa por saber gestionar adecuadamente las expectativas. Saber ilusionar no requiere de grandes discursos sino de efectivas conductas productivas. (más…)